El
trabajo de la mano izquierda llega en fragmentos
O brilla como un arco iris
¿Qué hace mi mano izquierda, la del
corazón?
Mi mano toca alto
Nota: a los 59 años, Tomas Tranströmer sufre un ataque cerebral que le inhibe para siempre el habla -afasia-, y paraliza parte de su lado derecho. Al comienzo, Tranströmer no se preocupa mucho. Sus recuerdos y su capacidad intelectual no habían sido afectados. El habla y la capacidad de movimientos en la mano derecha volverían, pensó. Pero después de un largo tiempo de rehabilitación llegó la convicción de que sería difícil –sino imposible- tener de vuelta la capacidad de hablar. El movimiento de su mano derecha estaba definitivamente perdido y quedó inmóvil pegada en su pecho como un ala.
