Uma coisa bonita era para se dar ou para se receber, não apenas para se ter. Clarice Lispector
26 de abr. de 2021
19 de abr. de 2021
Tempo :: Jomi (José Miguel) García Ascot (1927-1986)
DEL TIEMPO
A cierta edad, una cierta distancia de las cosas
se establece.
No volver a sufrir la misma entrega, la misma
separación
de la materia amada,
esa despoblación de la presencia,
esa decoloración de la mañana,
aquel largo dolor y su impaciencia.
Ya no. Es cierto que algo familiar se pierde
que nos acompaño desde la infancia:
el sueño antiguo de que todo dure
y de sentir su peso en nuestra herida.
Pero a cambio hemos ganado el aire,
su modificación cruzando el día,
sus distintos colores y su curva costaste:
un nuevo ser de tiempo que goza
como arena caliente entre las manos
-que vuelve a empezar, filtrando más despacio
cada gano,
hasta sentirlos todos en las yemas
y hasta sentir su ausencia, ya agotados.
A cierta edad empiezo a amar de nuevo
de distinta manera:
a amar lo que transcurre y lo que al fin se pierde,
a amarlo porque es otro
y porque dura, afuera, y porque acaba.
Su duración me da mi resistencia
que es cambio al fin, otoño de presencia;
su fin le da calor, y su distancia
me establece en el mundo
estando, estando más acá de la muerte
que no será ya nunca una sorpresa.
Biografía:
Jomi (José Miguel) García Ascot fue un poeta, ensayista, cineasta, crítico de arte y publicista de origen tunecino, nacido en 1927 e inmigrado en México a los doce años, con su familia, en 1939. Hijo de un diplomático español republicano, que viajó con su familia por diversos países entre los cuales Portugal, Francia y Marruecos, antes de exiliarse en México como resultado de la guerra civil española. Recibió en México el Premio Xavier Villaurrutia en 1984. Murió en 1986 en la Ciudad de México.
Ya en México, el joven Jomi (como se le conoció), estudió filosofía en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional Autónoma de México en donde también, más tarde, trabajó como docente. Fundó el Cine Club Universitario en la propia Facultad de Filosofía. También fundó el Cine Club de México en el Instituto Francés para la América Latina (IFAL), colaborando para el propósito con Jean Francois Ricard y José Luis González de León.
Trabajó y escribió en numerosas revistas y publicaciones cinematográficas como Cine Verdad, Telerevista y Cámara, Nuevo Cine, Plural, Siempre!, Vuelta, Dicine y la Revista de la UNAM. Colaboró también con la agencia publicitaria de Noble y Asociados para la que desarrolló la mayor parte de su actividad como publicista profesional.
Sostuvo amistad entrañable con Gabriel García Márquez, Premio Nobel de Literatura, quien dedicó a Jomi y a su esposa María Luisa Elío, originaria de Navarra, España, su famosa novela Cien años de soledad.
11 de abr. de 2021
Em todas as ruas :: Mário Cesariny (1923 Lisboa, Portugal 2006 )
Em todas as ruas te encontro
em todas as ruas te perco
conheço tão bem o teu corpo
sonhei tanto a tua figura
que é de olhos fechados que eu ando
a limitar a tua altura
e bebo a água e sorvo o ar
que te atravessou a cintura
tanto tão perto tão real
que o meu corpo se transfigura
e toca o seu próprio elemento
num corpo que já não é seu
num rio que desapareceu
onde um braço teu me procura
Em todas as ruas te encontro
em todas as ruas te perco
9 de abr. de 2021
Contranarciso :: Paulo Leminski
Contranarciso
em mim
eu vejo o outro
e outro
e outro
enfim dezenas
trens passando
vagões cheios de gente
centenas
o outro
que há em mim
é você
você
e você
assim como
eu estou em você
eu estou nele
em nós
e só quando
estamos em nós
estamos em paz
mesmo que estejamos a sós
8 de abr. de 2021
O proscrito :: Maria Firmina dos Reis
Vou deixar meus pátrios lares,
Alheio clima habitar.
Ver outros céus, outros mares,
Noutros campos divagar;
Outras brisas, outros ares,
Longe do meu respirar...
Vou deixar-te, oh! Pátria minha,
Vou longe de ti - viver...
Oh! Essa ideia mesquinha,
Faz meu dorido sofrer;
Pálida, aflita rolinha
De mágoas a estremecer.
Deixar-te, pátria querida.
É deixar de respirar!
Pálida sombra, sentida
Serei - espectro a vagar:
Sem tino, sem ar, sem vida
Por esta terra além - mar.
Quem há de ouvir-me os gemidos
Que arranca profunda dor?
Quem há de meus ais transidos
De virulento amargor,
Escutar - tristes, sentidos,
Com mágoa, com dissabor?
Ninguém. Um rosto a sorrir-me
Não hei de aí encontrar!...
Quando a saudade afligir-me
Ninguém irá me consolar;
Quando a existência fugir-me,
Quem há de me prantear?
Quando sozinho estiver
Aí à noite a cismar
De minha terra, sequer
Não há de brisa passar,
Que agite todo o meu ser,
Com seu macio ondular...
Cantos à beira-mar e Gupeva. 1a Edição atualizada 2017, p. 104, 105.
4 de abr. de 2021
:: ADÍLIA LOPES (1960)
Há coisas
sobre
as quais
me quero
calar
porque
preciosas
de mais
precisas
de mais
Outras
porque
cruas
de mais
como
aventais
"César a César", & etc. , Lisboa, 2003.
30 de mar. de 2021
Maçã-de-elefante, árvore-do-dinheiro, árvore da pataca, bolsa-de-pastor, dilênia, flor-de-abril ou fruta-cofre :: Dillenia speciosa
Reino: Plantae
Divisão: Magnoliophyta
Classe: Magnoliopsida
Ordem: Dilleniales
Família: Dilleniaceae
Género: Dillenia
Espécie: D. indica
Nome binomial
Dillenia indica
Maçã-de-elefante, árvore-do-dinheiro, árvore da pataca, bolsa-de-pastor, dilênia, flor-de-abril ou fruta-cofre (Dillenia indica) é uma árvore de caule reto e grande copa, da família das dileniáceas. Suas flores são axilares ou terminais, solitárias, de cor amarela ou alva, aromáticas. O fruto é uma cápsula globosa, pêndula, indeiscente, de pericarpo duro e fino, e circulada pelo cálice, que se torna carnoso. Contém numerosas sementes, envoltas em polpa gelatinosa. As sépalas podem ser comidas cruas, cozidas ou em geléias e sorvetes; os frutos entram na composição do curry e de doces. Fornece madeira de cerne compacto e resistente, própria para construção naval. O imperador Dom Pedro I esconderia moedas nos frutos das árvores da pataca dos jardins do Palácio de Verão para brincar que ali nascia dinheiro. Podem ser facilmente encontradas em São Paulo, no Parque Previdência, no Parque do Ibirapuera ou em frente ao prédio de Engenharia Civil da Escola Politécnica da USP. Em Joinville SC, é conhecida como Coco de Adão, tem muitas arvores nas praças, é comum acidentes com este fruto, simplesmente cai na cabeça dos transeuntes.
Sinonímia botânica: Dillenia speciosa Thunb., Dillenia elongata Miq., Dillenia indica f. elongata (Miq.) Miq
29 de mar. de 2021
Mas e a herança? :: Angela Scott Bueno
26 de mar. de 2021
25 de mar. de 2021
Abdias Nascimento (1914 – 2011) Franca SP
"[...] Para a infância negra
construiremos um mundo diferente
nutrido ao axé de Exu
ao amor infinito de Oxum
à compaixão de Obatalá
à espada justiceira de Ogum
Nesse mundo não haverá
trombadinhas
pivetes
pixotes
e capitães-de-areia."
Olhando no espelho (1980), Abdias Nascimento.
24 de mar. de 2021
El Cabello de mi Abuela :: Paola Klug
Mi abuela paterna era una indígena chinanteca originaria de Veracruz; hija de padre yaqui y mujer de mulato. Tenía la estatura baja y la sonrisa grande. Su tez era morena y sus ojos avellanados. Lo que más me gustaba de mi abuela era su cabello; era tan largo que la trenza le llegaba por debajo de la cadera. Cuando conoció a mi abuelo dejó su mar y se trasladó a la ciudad de México junto a él; con mucho esfuerzo se hicieron de un pedazo de tierra en el lugar de coyotes y en su nuevo hogar plantó muchos árboles frutales para no extrañar el olor de su origen.
A ella le encantaba contar historias debajo del naranjo, siempre me hablaba de la zafra o me enseñaba el canto de los ríos; ella siempre hablaba de todo, menos de ella. En ocasiones yo miraba sus ojos tristes y contemplaba su dolor cada vez que se destrenzaba y cepillaba sus largos cabellos. Una vez me atreví a preguntarle porqué era infeliz; a mi corta edad y con mi poca experiencia le enumeré todas las cosas por las que según yo tenía que sentirse contenta: Tata te quiere (el abuelo) mi papá, mi tía y yo te queremos mucho nana Cada. Tienes un jardín muy bonito y tu corral está lleno y tus animales son felices. ¿Porque estás triste?
Ella me miró con ternura, me levantó y me puso sobre sus rodilla frente al espejo. Comenzó a cepillarme el cabello con su propio cepillo y me dijo con su voz dulce:
– Te voy a contar un secreto que solo las mujeres conocemos. Cuando crezcas conocerás a muchos hombres que pondrán una gran sonrisa en tu cara. Te contarán hermosas historias y te cubrirán con sus brazos cuando tengas frío. A ellos pequeña, puedes entregarles el corazón y tus suspiros, puedes darles una gota de tu sangre y muchas promesas pero por nada del mundo le des uno solo de tus cabellos.
-¿Porque iba a darle mi cabello a un hombre Nana Cada?
-Porque hay veces en las que uno quiere entregar todo a las personas que ama.
-¿Le diste tu cabello al Tata?
-No mi niña, al Tata solo le di mi corazón.
-Entonces ¿que hombre tiene tu cabello?
Mi abuela sonrió como una niña al recordar una travesura
-Se lo di a un muchacho que conocí antes de que Tata llegara a mi pueblo. Era muy guapo ¿sabes? Su cara era delgada al igual que sus manos, él nació más al norte del pueblo del que era mi padre. Llegó en el tren y yo fui lo primero que vio al bajar en la estación. Su mirada era tranquila como el arroyo detrás de mi casa y su piel del color de la mía. Se llamaba Kai.
Giré el rostro y fruncí mi nariz para ver directamente a mi nana
-¿Y porqué no te casaste con Kai en vez de casarte con el Tata?
-Me case con él. Yo lo quería mas que a mi carne y él me quería mas que a la suya. Y fuimos felices mucho tiempo. Yo le entregué mi corazón, mi sangre y..
-¿También tu cabello Nana Cada?
-Si, también mi cabello -me contestó sonriente-
-¿Y que pasó con él?
-Se ahogo en el mar y se llevó entre el agua un pedazo de mi vida.
Me quedé en silencio mientras limpiaba las lágrimas de mi abuela.
-Niña, a un hombre puedes darle tu sangre porque la sangre de las mujeres viene y va cada mes, puedes entregarle tu corazón porque sus emociones cambian como lo hacen las mareas pero si le entregas uno solo de tus cabellos le darás tu fuerza de vivir. Con tu cabello tejes sueños y atrapas pesadillas cada noche; con tu cabello escuchas las voces de tus ancestros susurrándote en el viento, tu cabello habla con las aves y las estrellas. No es solo cabello es el único trozo visible de tu espíritu. Es la balanza que te equilibra, un hilito de luz que sube por el cielo y te conecta con todo.
-¿Cómo le entregaste tu cabello a Kai Nana?
-Arranqué uno de los míos y lo trencé con uno de los suyos, pero él también me dio uno. ¿Quieres verlo?
-¡Si abuelita!
Mi abuela sacó un mechón de cabello detrás de su nuca en el que había una trenza muy delgada y pequeña. En la parte superior había un pequeño nudito hecho con varios cabellos.
-Aquí está nuestra unión pequeña. Él es parte de mi y yo soy parte de él para siempre.
Mi abuela me mostró orgullosa su trenza como si fuera una argolla de compromiso o un anillo de bodas.
-¿Cuando desaparecerá el nudo nana?
-Nunca. Esta unión es eterna. El nudo no desaparecerá jamás porque lo tejimos con nuestras vidas.
Me bajó con cuidado y comenzó a trenzar nuevamente toda su cabellera dejando el nudo de Kai oculto entre su larga trenza. Nana Cada cambió inmediatamente de tema, me contó tantos cuentos ese día que olvidé la historia que escondía su cabello. Pasaron los años y jamás volvimos a tocar el tema. Mi tata murió cuando yo era una adolescente y mi abuela estuvo con él en todo momento. Semanas después mi tía llamó a la casa informándonos que mi Nana también había muerto. Estaba desconsolada pero recuerdo que repetía constantemente
¡Su cabello! ¡Su cabello!
Cuando llegamos a casa encontramos a mi nana recostada sobre su cama; sus ojos estaban cerrados y mi tía había colocado su larga trenza entre sus manos. Entonces recordé a Kai y el amor que se tenían. Dijo mi tía que la encontró tirada frente a su espejo y sobre la alfombra estaban unas tijeras; el doctor dijo que mi Nana Cada había muerto de un paro al corazón pero yo sabía que en verdad ella se había cortado su propia vida…
La historia de mi abuela es un triste pero espero que no me mal entiendan, Nana Cada quería a mi Tata, lo quería mucho pero aveces una mujer puede dar cosas mejores que su corazón.
-
Tem de haver mais Agora o verão se foi E poderia nunca ter vindo. No sol está quente. Mas tem de haver mais. Tudo aconteceu, Tu...
-
A ilha da Madeira foi descoberta no séc. XV e julga-se que os bordados começaram desde logo a ser produzidos pel...